lunes, 24 de agosto de 2009

de la nostalgia a las viejas portadas de los VHS


Cuando quise hablar de la nostalgia a las viejas portadas de los vhs, escribí algo que se me hizo tan pesado que decidi omitirlo... ahora os lo muestro inacabado, sin corregir... porque después de leer la columna de Nacho Cerdà en la revista "Scifiworld", me di cuenta que lo que él decía se asemejaba más a lo que yo quería expresar... pero bueno me la suda, aqui mi "unplugged":

Como en el mundo de la música, las nuevas tecnologías están haciendo mella en la industria del cine, aunque las discográficas se lo ganaron a pulso, nos metieron en el túnel del CD, subieron los precios con el formato digital, cuando los costes de producción eran ínfimamente más baratos; pero no se dieron cuenta que al final del túnel había luz, nos abrieron el camino, y ahora no quieren que caminemos por él. El CD, es un formato que se acumula en las estanterías, y salvo excepciones, no tienen la nostalgia que tenia el vinilo, por ello los coleccionistas, han vuelto a comprar LP, desde luego esto no va a ser un retorno al pasado, el vinilo no volverá, a modo de grandes multinacionales, pero las independientes y algunos grupos, “indies”, han vuelto a editar en vinilo. La gente va a seguir descargando gratis de la red, siempre que se pueda. Y los freakis volveremos al vinilo. Los músicos ganaran dinero con sus conciertos, porque gracias a Internet, músicos que nunca se hubieran dado a conocer están saliendo a flote. Existe una oportunidad para todos, por mucho que se quejen “los de las casas en Miami”, al mundo de la música esta llegando la democracia, pero esa democracia quimérica… esto no tiene marcha atrás mientras, como he dicho antes se pueda, y aparezca una intervención fascista-gubernamental-legal… pero sólo afectara aquellos que escuchan los 40 principales, a los que consideramos la música como arte, la mayoría de grupos que nos gustan acabaran “regalando” su música en formato digital, y nosotros se lo agradeceremos comprando sus joyitas en vinilo y asistiendo a sus conciertos.
Pero, bueno el tema de la música es un capítulo aparte, que he querido que sirva como introducción al tema del cine, pero no al cine como gran industria, sino al pequeño negocio del Video-Club, que empiezan a extinguirse.
La causa principal, seguramente sea de nuevo el rollo de Internet. Pero yo no voy hablar de eso, tampoco de la nostalgia del VHS, porque no la hay (como sistema de visionado), es como si en la música volviéramos a reclamar las cintas de cassette. Y desde luego que el DVD es un formato cojonudo para coleccionar, ¿Que ha fallado entonces, para que un formato relativamente nuevo empieza a temblar?
Pues empezare la historia, desde un punto de vista personal (como particular), cuando compre mi primer reproductor de DVD, alucine con la cantidad y calidad de películas que se estaban editando. Así que empecé a comprar, pero algo fallaba… un ejemplo compre “Golpe en la Pequeña China” y… que puta mierda de carátula era esa, una foto de Kurt Rusell pistolón en mano, cuando la que recordaba era una cojonuda y colorida ilustración que te hacia viajar a la película antes de verla. En las continuas visitas al Video-Club de mi barrio, me di cuenta que a medida que avanzaban las estanterías de DVD apilonado, y retrocedían los VHS, las visitas cada vez eran más cortas y aburridas.
El auge de los Video-Clubs fue en los 80, entonces yo era un crío, que pasaba tardes enteras en el Video-Club, mirando y alucinando con aquellas portadas, se me hacia dificilísimo escoger película, al final después de horas escudriñando estanterías, siempre volvía a casa con 3 ó 4, para pasar todo el fin de semana.
Esta claro, no me estoy volviendo loco, se que los Video-Clubs, no se están hundiendo por las portadas de sus películas, porque no vivimos en un mundo “freaky” de Video-Club, claro; pero la gente corriente, esa que va( o iba) a por el último estreno, antes iba a por “Terminador”, que no estaba disponible, y miraba en la estantería y se encontraba una portada con un tío cachas, con el brazo robotico, y entonces alquilaba “Destroyer”.Claro cuando llegaba a casa, y veía la peli el tío ese no estaba tan cachas con Schwrzeneger, y el brazo parecía de plástico; pero bueno a la semana siguiente vería “Terminador” y se le olvidaba. Tiempo después iría a por una de Bruce Lee y se tendría que conformar con un de Bruce Li.
En fin que después de todo el rollo que llevo, me doy cuenta que yo solo quería hablar de la nostalgia: de la nostalgia de los viejos video-club, En mi pueblo, Sant Cugat, había uno de siete plantas (cuento de memoria), “Video Galerías Rusiñol”, aquello era increíble, un sueño… de los que nunca volverán.
De la nostalgia, sobretodo, de aquellas portadas, y sobretodos las que no tenían foto, las de ilustraciones, aquellas portadas imposibles que luego no tenían nada que ver con la película que había en su interior, pero bueno aguantabas la hora y media sólo esperando a que pasara algo parecido a lo del dibujo de su portada. El fin de semana de nuevo picabas, y volvías a coger a otra película “casposa”.
Realmente los ilustradores de cine sí son una especie en extinción, y los Vídeo-Club seguro que acabaran extinguiéndose, y claro que no por la desaparición de las cojonudas portada, pero…